Llévame por la ruta de tus besos. Es tan peligrosa y sinuosa que hasta da
vértigo arrimarse un poco al precipicio de esas emociones.
Viajemos juntos por la carretera de la pasión marcando fuertemente cada
cambio de ritmo que hacemos, cada marcha que metemos.
Exprimiendo al máximo cada uno de los engranajes de nuestros motores
aceleramos sin duelo y ahora sí. Ya vamos cogiendo la temperatura adecuada de
navegación y rodaje. ¿Te gusta conducir? Pues me encanta conducirte bien a
fondo.
Marcos CL

No hay comentarios:
Publicar un comentario